Read with BonusRead with Bonus

CAPÍTULO 16

Dos semanas después...

Con una presión de mis rodillas, incito a Prim a galopar. La yegua moteada resopla en reconocimiento, tan feliz de estar al aire libre como yo. La mañana ya es húmeda y está impregnada con los aromas de caballo y cuero. A medida que mi caballo acelera el paso, el sonido de ...