Read with BonusRead with Bonus

Ya era hora, maldita sea

Tres semanas después

Bostecé mientras veía a los chicos prepararse para ir a cazar. Maddy me había despertado con la intención de ir con ellos. Me senté con cuidado para no aplastar a mi pequeño cachorro que estaba acurrucado contra mi cuerpo, tratando de mantenerse caliente. Mamá había dicho que p...