Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 32

Él continuó mirándome atónito, sorprendido por lo que dije. Demasiado impactado por mi arrebato como para reaccionar de alguna manera, siguió asimilándolo todo hasta que salió de su estupor.

—No, tienes razón —comentó—, no hemos pensado en ti ni una vez —admitió.

—Está bien —respondí—, lo entiendo...