Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 41 Bosque de abedules

Cuando vuelvo a abrir los ojos, no me sorprende del todo ver que estoy en el bosque de abedules de hojas doradas. Gimo un poco, cubriéndome la cara con las manos, aunque la emoción corre por mis venas. Porque – quiero decir – solo estoy aquí porque quiero estar, ¿verdad? El estado de sueño solo apar...