Capítulo seis
Fuimos a la oficina de Agni. Agni comenzó a ofrecerme y a reservar citas para mí para los próximos dos días. No le dije nada. Respeté cada una de sus órdenes, es decir, servir té, barrer su habitación y estar de pie todo el día. Regresamos a casa.
"Jwala, cámbiate de ropa y cambia de habitación", dijo Agni.
"¿Qué?"
"Ponte un sari o un salwar kameez. No debería encontrar ninguna de tus pertenencias en mi habitación. Pide ayuda a la criada si la necesitas".
Asentí aunque no entendía la razón.
"Hoy vienen a visitarme mi hermana menor y mi hermano. Se quedarán aquí de tres a cuatro días. No quiero que se enteren de nuestra relación. Debes lucir decente delante de ellos".
"¡De acuerdo! Si quieres, me iré a mi residencia universitaria".
"No, no tienes oportunidad de escapar de mí. Voy a presentarte como mi prometida ante ellos. Así que debes lucir hogareña. Otra cosa, mantén la boca cerrada durante estos días. Si dices algo inútil o innecesario delante de ellos, no te dejaré ni siquiera después de cuatro meses. Así que mantente bajo control".
"De acuerdo".
"Otra cosa, cocinarás la comida para ellos mientras estén aquí. A mis hermanos no les gusta la comida preparada por la criada. Vienen del internado y prefieren la comida casera".
"Está bien", dije.
"¿Sabes cocinar? Solo una vez me preparaste comida y era como tu cara", dijo, lo que me enfadó.
¿Qué quiere decir? Él desayunó completamente. ¿Por qué está hablando así?
"Sé cocinar. No creo que el desayuno que te preparé fuera insípido", dije.
"No hablé de eso. Dije que era como tu cara. ¿Por qué asumes que la comida es insípida? ¿Tu cara es fea?" Sonrió.
¡Idiota! Nunca podré entender a este Agni. La chica que se case con él se volverá loca con su comportamiento.
"No te preocupes, tal vez seas esa chica afortunada", dijo Agni.
Lo miré.
"Mira, no te comportes así delante de ellos".
"No te entiendo".
"Expresar tus sentimientos internos y asumir que es tu voz interior".
"De acuerdo".
Cambié de habitación y me cambié de ropa. Me estoy preparando y vi a Agni mirándome.
"Este vestido te queda muy bien. Pareces una p*** en esos vestidos cortos que te elegí. Ahora, luces hogareña y hermosa", me elogió Agni por primera vez.
Antes de que me sintiera feliz, volvió a su originalidad.
"Sin embargo, cariño, no olvides que eres mi p***. Ten en cuenta quién eres".
¿Dejó alguna oportunidad para lastimarme? No entiendo por qué me insulta incluso si no hice nada mal. Creo que le encanta molestarme.
"No muestres tus lágrimas inútiles ante ellos o te haré derramar sangre en lugar de gotas de agua salada", dijo Agni sujetando mis mandíbulas.
"De acuerdo."
"¡Bien! Ve y prepara la cena. Pueden llegar en cualquier momento."
Fui a la cocina. No sé qué preparar.
"Agni, ¿qué les gusta comer?"
Él cerró los ojos por un momento. ¿Está enojado?
"¿Qué te gusta comer?" me preguntó Agni.
"¿Qu... Qué?"
"Quiero decir cualquier cosa que te guste, pero que no sea muy picante".
Preparé la comida para ellos. Después de un rato, llegaron los hermanos de Agni. Su hermana y su hermano tienen doce y catorce años.
"Hermano, ¿cómo estás?" le preguntaron abrazándolo.
"Estoy bien, ¿y ustedes dos?"
"¡Estamos fantásticos!", dijeron felices y me miraron.
"¿Quién es ella?" preguntó su hermana.
"Jwala, acércate", dijo él, y fui hacia él.
"Ella pronto será tu bhabhi (cuñada). Su nombre es Jwala, mi prometida", dijo poniendo su mano en mi hombro.
"¿Bhabhi, vas a ser nuestra bhabhi?" preguntaron, y miré a Agni.
Agni frunció el ceño hacia mí.
"Sí, yo... Soy... Su bhabhi", dije.
"Anjana y Ved, vayan a refrescarse", les dijo a ellos.
"Jwala, ven a mi habitación".
Fui hacia él. Cerró la puerta.
"¿Estás loca? ¿No puedes responderles adecuadamente? Mira, no deben tener ninguna duda. Comportate correctamente, Jwala".
Me está gritando, y alguien golpeó la puerta.
"¡Bhaiya (hermano), ¿dónde está bhabhi?" gritaron desde afuera.
"Me iré", dije, pero él me agarró la muñeca y me empujó contra la pared.
"¿Qué pasa, cariño? ¿Crees que eres mi prometida? Eres mi p***. No te vayas a menos que te lo pida", dijo enterrando su cabeza en mi cuello.
"¡Bhaiya, ¿dónde está bhabhi?"
"Ve a su habitación, Anjana", dijo moviéndose más cerca de mí y besándome.
"La vimos allí y en la cocina. Jwala bhabhi no está en ninguna parte", dijo Ved.
"¡Bhaiya, sabemos que está contigo. Sácala. Está mal estar juntos antes del matrimonio", me dejó con sus palabras.
"Sal", dijo, y arreglé mi sari y abrí la puerta.
"¿Qué quieren Anjana y Ved?" dije sonriendo.
"Bhabhi, tenemos hambre. Por favor, prepáranos algo".
"Ya les preparé la cena. Vamos, vamos", dije.
Agni y sus hermanos se sentaron alrededor de la mesa. Les serví la comida.
"Bhabhi, únete a nosotros".
Miré a Agni.
"No, Ved, ella no debería comer con nosotros. Quiero decir, a ella no le gusta comer antes que yo. Es muy tradicional y le encanta seguir las costumbres de la edad", dijo.
Entendí que no iba a darme cena. Ellos terminaron su comida. Yo estaba limpiando los platos, y él vino hacia mí.
"Cariño, ¿tienes hambre?"
"No, no, está bien".
"Pero quiero que comas. Ven a mi habitación. Hice arreglos especiales de comida para ti que vas a tener a partir de hoy", Agni sonrió y se fue a su habitación.
Terminé de lavar los platos y fui hacia él. Cerró la puerta y me dio el plato. Era arroz con chile en polvo.
"Cómetelo, cariño. Te va a gustar", dijo.
Me metí dos bocados en la boca con lágrimas. Para el tercer bocado, sentí mucho picante.
"Agua", pedí.
Él se rió.
"Come dos bocados más, y te daré agua".
Tomé dos bocados más con dificultad y supliqué por agua. Agni vertió agua desde arriba, haciéndome saltar y llorar de nuevo. Me echó un poco de agua en la boca y el resto en el suelo. Se rió al ver mi estado y me llevó a la cama. Me desvistió y entró sin tener en cuenta mi situación.
"Me encanta cuando te vuelves completamente indefensa. Me encanta decidir todo lo que te concierne. Ahora ve a tu habitación, pero no tomes agua ni nada. Quiero que sufras hasta la mañana saltando en la cama y agarrándote el estómago. Si Anjana y Ved no estuvieran aquí, te habría usado hasta la mañana y habría disfrutado de tus lágrimas y dolor. Pero mala suerte, no puedo verlo", dijo Agni.
Me vestí y fui a mi habitación. Sufrí toda la noche. Por la mañana preparé el desayuno para ellos. Sin embargo, esta vez no tomé agua ni nada, ya que sé que me matará si bebo agua sin su permiso. Él me miró y se rió. Me permitió desayunar y beber agua. Fuimos a la oficina. Esta tarde, me enviará a un cliente.
Trabajé para él y soporté sus palabras con calma. Hice todo lo que dijo. Por la tarde, fui a hablar con él.
"Agni. Quiero... Hablar contigo", dije lentamente.
Él me miró.
"Dime", dijo, de pie cerca de su escritorio de oficina.
Me senté de rodillas sosteniendo sus pies.
"Agni, por favor, ayúdame. No puedo... No puedo hacer eso. No puedo ir con otros hombres. Es mejor que me mates que enviarme con ellos. Por favor, Agni, haré lo que sea que digas excepto esto. No puedo acostarme con otros hombres. Por favor, ayúdame. Soportaré cualquier castigo por esto", supliqué llorando.
Me miró por un momento.
"Levántate, Jwala".
Me levanté y me puse delante de él.
"¿De dónde sacaste este valor para decirme que no? Creo que debería enseñarte más".
"Agni, esto no es valentía. Te estoy suplicando. Te estoy suplicando por tu misericordia. Solo ponme en el lugar de tu madre o hermana y piensa".
Me agarró la garganta.
"Nunca hables de mi madre o hermana. Ellas nunca ofrecerían su cuerpo para salvar a alguien más".
"Voy a dejar de enviarte a mis clientes. No reservé ninguna cita para ti. ¡Relájate! Fue un drama para asustarte. Sin embargo, necesitas hacer algo para aceptar tu solicitud", dijo Agni.
"Dime".
"Debes trabajar para mi empresa día y noche. Me refiero a que debes trabajar en proyectos. Si no logras que nuestra empresa gane proyectos, te enviaré de nuevo con los clientes. Si fallas incluso en un proyecto, te entregaré a ellos. No dudaré en empezar un negocio con tu cuerpo para ganar dinero si fallas en conseguir proyectos para nuestra empresa".
"Estoy de acuerdo".
"Está bien, pero no olvides que recibirás tu castigo por negarte a mis palabras esta noche. Te haré controlar tus palabras y sentimientos. Obtendrás lo que te mereces esta noche", dijo Agni apretando mi garganta con fuerza.
Mi cuerpo temblaba con sus palabras. No sé qué más quedaba por torturarme. Ya había utilizado todas las formas para atormentarme.
Se rió al ver mis expresiones de miedo.
"No te preocupes; no voy a hacerte nada mientras mis hermanos estén en casa. Puedes relajarte durante estos dos o tres días. Después de eso, recibirás tus castigos de una vez. Te compadezco, cariño. No sé cómo soportarás todos los castigos de tres días de una vez. Estoy seguro de que harás algo que me enoje en estos tres días. No puedes vivir sin hacerme enojar y sin que te golpee. ¿Te encanta ver mi cinturón volando sobre ti, verdad?" Se rió de nuevo.
Le encanta lastimarme. Aunque no hice nada, encontrará algo para castigarme. No sé por qué está tan enojado conmigo todo el tiempo. Comencé a trabajar en el proyecto. Los días pasaron tan difíciles con sus regaños y bofetadas. Sus hermanos se fueron al internado, y él me mostró el infierno de nuevo. Pasó un mes. Un día estaba trabajando, y me llamó a su oficina.
"Te ves muy linda cuando lloras. Te ves hermosa cuando estás a mi lado desnuda en la cama. Te ves fantástica cuando me ruegas por una gota de agua y saltas para beber agua cuando la vierto desde arriba. Jwala, ¿cómo sería si hacemos nuestra relación permanente a través del matrimonio? Me encanta ponerte en orden, verte asustada de mí y seguir todo lo que digo. Quiero que estés bajo mi control para siempre, suplicando y rogando por mi misericordia", dijo mirándome.
"Por cierto, Jwala, me acerqué a tu familia para una alianza. Están casi positivos hacia la propuesta. Una vez que digan que sí, estarás bajo mi control para siempre. Excepto tu forma de vestirte y entregarte a otra persona, todo será igual incluso después del matrimonio. Después de casarte conmigo, estarás encerrada en mi habitación para siempre sin darte ninguna libertad. ¿Qué piensas sobre nuestra boda? ¿No es emocionante vivir como mi p*** para siempre? Me casaré contigo pero te trataré solo como una p***".
Sus palabras y propuesta de matrimonio me hicieron sentir como si mi cabeza diera vueltas. Todo se volvió borroso ante mí. No, no quiero casarme con él.