Read with BonusRead with Bonus

Ethan

Volvi mi mirada hacia ese chico. Oh no. Me levanté con los ojos sorprendidos. Me quedé atónita al verlo. ¿Cómo es posible?

—Hola, señora —dijo el hombre. Con una sonrisa agradable, me miró. No podía apartar la mirada de él. Dijo: —Buenas noches, señora. Aunque yo no podía decir nada. Mi garganta est...