Read with BonusRead with Bonus

CAPÍTULO OCHENTA Y CUATRO

Elisabeth.

Me despierto con dolor de cabeza por pensar en demasiadas cosas ayer. Sé que prometí mantenerme tranquila, pero es imposible. Sé que esto no es bueno para el bebé, y lo peor de todo es que estoy teniendo muchas pesadillas, siempre apoyada por Rosa, que se queda conmigo hasta que me duerm...