Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 384: Raymond, ¿has venido a recogerme?

Margaret donó algo de dinero al sacerdote, quien le dijo que podía compartir en silencio los deseos de su corazón con Dios.

—Dios es misericordioso y tiene la mayor compasión por las almas pobres bajo los cielos —dijo él.

Margaret se arrodilló en el suelo, rezando para que Dios bendijera a Raymond...