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Capítulo 82 Regresaré a Estados Unidos

Un sirviente llamó a la puerta desde afuera.

—Señora Sinclair, ¿está despierta? El señor Sinclair preguntó si quiere bajar a almorzar.

Cada vez que Lillian pensaba en Alexander, un odio feroz surgía en su corazón, y gritó hacia la puerta.

—¡No voy a comer!

El sirviente se fue, y Lillian miró la ...