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Capítulo 238 El consejo de Cheryl

El teléfono sonó, y Yvette, sintiéndose adolorida por todo el cuerpo, se levantó lentamente para contestarlo.

Albert siempre se ponía demasiado brusco después de haber bebido.

Yvette levantó el auricular, su voz un poco débil —¿Quién es?

El sirviente al otro lado dijo —Señora Valdemar, el asisten...