Read with BonusRead with Bonus

Jillian: Bonita enamorada (Segunda parte)

Se quedó quieto bajo sus manos, y donde su palma descansaba en su pecho, sintió su corazón acelerarse, latiendo con fuerza.

—¿Estás segura? —preguntó Jack.

—Sí. Pero aún no puedo pedir tu marca.

Esa línea no podía ser cruzada. Lo había considerado, pero una vez que se marcaran mutuamente, estar sepa...