Read with BonusRead with Bonus

Capítulo noventa y seis

Izabella agarró el pomo de la puerta. Le quemó la mano y la retiró rápidamente, presionando la llave en la cerradura. La puerta se abrió de golpe y toda la habitación estaba en llamas. La pared se había derrumbado y las llamas salían hacia el techo. Había un cuerpo tendido no muy lejos de los niños....