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La llegada al Edén

Joey

Golpeé el reposabrazos con impaciencia, haciendo que Caleb se riera. Ya había revisado mi teléfono 692,553,017 veces en busca de un mensaje de Maddie. Definitivamente me estaba arrepintiendo de haber aceptado dejar que mi niña se fuera a otro estado sin mí. No quería nada más que tenerla en mi...