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El extraño

ROMANY

Alex... maldito imbécil.

—¿Qué pasa? ¿Te has quedado sin palabras? —Él sonríe con suficiencia y yo lo fulmino con la mirada—. Pensándolo bien, tal vez no deberías tomar miel y limón. Es como si por una vez no pudieras responder.

Vete al diablo, Alex.

Le hago un gesto obsceno y él atra...