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14. Los alfas entran en la arena

Samantha se sentó frente a Rani.

—Por favor, no te alarmes, solo estoy aquí para asegurarme de que no te escapes, porque si lo haces, bueno, mi trabajo como su secretaria personal estará en juego.

Sintiendo un poco de relajación a su alrededor, Rani negó con la cabeza. Comparada con sus jefes, Sama...