Read with BonusRead with Bonus

479

Como sabía que era de mala educación mirar fijamente a los demás, Alice volvió a concentrarse en su trabajo.

Hoy, estaba a cargo de registrar la frecuencia del pulso y la presión arterial del paciente.

Sin embargo, justo cuando estaba levantando su bolígrafo, alguien accidentalmente golpeó su codo...