Read with BonusRead with Bonus

30. ETHAN: UN SHOCK TRAS OTRO

—¡No puedes estar hablando en serio! —Los ojos de mi padre se entrecerraron, pero no dijo nada. Miré a mi madre, que estaba sentada en el sofá. Sus ojos pálidos me suplicaban que entendiera, pero me costaba asimilar lo que estaba escuchando.

—Ethan —me llamó por mi nombre—. Por favor, trata de ente...