Read with BonusRead with Bonus

CAPÍTULO 64 - LA CIUDAD DE LAS BRUJAS

Entré en la habitación decidida, con las manos apretadas de ira mientras me acercaba al Alfa, que se estaba vistiendo. Le agarré el brazo con fuerza, y él levantó las cejas, sorprendido por la intensidad de mi agarre.

—¿Es esta tu respuesta? —gruñí, incapaz de contener mi enojo—. ¡Si así va a ser n...