Read with BonusRead with Bonus

Tu muerte está en mis manos

Sus ojos recorrieron la habitación. Era la primera vez en semanas desde que había regresado a la casa De Luca que estaba en la habitación.

Estaba exactamente igual que como la dejó.

Arabella frunció la nariz y se sentó en la cama al escuchar un golpe en la puerta.

Abrió la puerta, pensando que era J...