Read with BonusRead with Bonus

Llámame maestro

Arabella se cubrió la cara con las manos y sacudió la cabeza.

Respiró con dificultad y parpadeó para contener las lágrimas en sus ojos.

Lo que había sucedido hace unos segundos estaba más allá de su comprensión y no pensó que ocurriría.

Sandro debía pensar que era una zorra ahora que había conseguid...