Read with BonusRead with Bonus

Una ráfaga del pasado

Anastasia entró en la habitación de Essence y la encontró con las piernas recogidas contra el pecho y la cabeza apoyada en ellas. Essence giró su rostro.

—No quiero hablar de eso, Ani —dijo.

Anastasia asintió.

—No te voy a presionar, pero llevas tres días encerrada aquí. ¿Tiene algo que ver con K...