Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 93: Ruptura

¡Mierda santa!

Mi cuerpo se congeló como un ciervo ante los faros de un coche. Me habría maldecido a mí mismo si no fuera porque mi cerebro estaba corriendo a mil por hora, tratando de pensar en una respuesta. A pesar de que mi cuerpo se negaba a obedecerme, mi tono sarcástico permaneció. —Es mi ...