Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 35: No es una cita... ¿Verdad?

Los cálidos labios de Julian se presionaron contra mi frente con una suave presión. A pesar de toda mi molestia, frustración y enojo, todavía sentía esas malditas mariposas revoloteando en mi estómago. El apuesto hombre ni siquiera me dio la oportunidad de quejarme o de apartarme de su agarre porque...