Read with BonusRead with Bonus

Capítulo veinticinco

Sábado.

Elijah Foster.

La veo entrar al edificio y frunzo el ceño, me subo al coche.

—¡Al cobertizo! —grito irritado.

—Sí, señor.

No puedo creer que ese idiota lo haya herido, quería divertirme mucho más con ese desgraciado que mató a nuestro padre. Pero admito que tenerlo atrapado en el sótano...