Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 40

DESCONOCIDO

Coloco a la bella durmiente en el suelo.

—Jefe, ¿necesita que haga algo? —dice la loba que acaba de entrar. Gruño—. Asegúrate de que siga dosificada con acónito, pero limita sus dosis porque quiero que escuche lo que tengo que decirle. Además, llegará un invitado en breve —le digo.

Ju...