Ella es mi novia
Sin embargo, para mi sorpresa, fueron tres mujeres muy hermosas y altas las que salieron de su habitación. Las tres tenían figuras de modelos. Eran altas y con rostros atractivos. Una tenía el cabello rubio platino que debió haberle tomado horas en el salón para lograrlo. Otra tenía el cabello oscuro con impresionantes ojos azules. La tercera mujer tenía el cabello castaño rojizo con hermosos ojos verdes. Lo único que tenían en común, aparte de su belleza y altura, era el hecho de que no llevaban mucha ropa.
—Oh... hay una chica aquí... —dijo la mujer rubia con una voz dulce mientras las tres me miraban de arriba a abajo.
—¿Eres... la novia de Hayden? —preguntó curiosamente la chica de cabello castaño rojizo.
—Probablemente... no... —dijo la chica de cabello oscuro mientras me miraba fijamente.
—Sí... quiero decir... parece... ¿ordinaria? —dijo la chica rubia con una risa.
—Tal vez sea su sirvienta... —sugirió la chica de cabello castaño rojizo. Luego todas asintieron como si hubieran llegado a un entendimiento.
—Probablemente sea su sirvienta —afirmó la chica de cabello oscuro en acuerdo.
Odiaba el hecho de que estuvieran hablando de mí abiertamente cuando yo estaba justo allí. Las observé con desprecio mientras esperaba que este episodio terminara para poder dirigirme a mi habitación. No me importaba lo que pensaran o dijeran de mí.
—Hola, ¿podrías ayudarnos a conseguir unas toallitas húmedas? —me dirigió la palabra la chica rubia por primera vez.
—Oh... y ya que estás, ¿podrías limpiar nuestros zapatos? —añadió la chica de cabello castaño rojizo con una sonrisa falsa.
Estas chicas son tan groseras. Las palabras que salen de sus bocas son tan feas que no coinciden con la belleza de sus rostros. Su carácter debe estar tan podrido debajo de esas gruesas capas de maquillaje que llevan en la cara. Bueno, no es asunto mío, pensé mientras las miraba fijamente antes de darme la vuelta para alejarme.
Voy a ignorarlas y volver a mi habitación donde puedo disfrutar de este yogur griego con frutas y luego irme directamente a la cama. Ya tengo suficientes problemas en mi vida y añadir una pelea con estas tres supermodelos no me va a ayudar.
Cuando me di la vuelta y comencé a dirigirme hacia mi dormitorio, una voz me hizo girar de nuevo en estado de shock.
—Es mi novia. Será mejor que cuiden lo que dicen...
Me di la vuelta para ver a Hayden apoyado en el marco de la puerta de su habitación con una expresión indescifrable en su rostro. Su tono era helado y, aunque esas palabras no estaban dirigidas directamente a mí, sentí que los pelos de la nuca se me erizaban de miedo.
Las tres mujeres se quedaron inmediatamente en silencio y congeladas por la sorpresa. No las culpo, yo también estaba atónita, pero quizás por una razón diferente.
¿Qué acaba de decir?!
No... no... no... ¡NO!
No somos novios. Apenas conozco a este tipo y claramente él tampoco me gusta. Yo tampoco lo gusto a él. ¡No nos gustamos!
Lo miré con asombro, pero Hayden no me prestó atención mientras hablaba por su teléfono. En cuestión de segundos, tres hombres vestidos de negro entraron corriendo en la habitación y comenzaron a medio arrastrar y medio cargar a las tres hermosas mujeres fuera de la habitación. Observé todo en estado de shock...
—¡Hayden! Lo siento mucho... por favor, no hagas esto.
—Perdóname, Hayden... por favor...
—Te amo tanto, Hayden... por favor, perdónanos esta vez...
Las tres mujeres suplicaban mientras comenzaban a llorar. Era una escena tan desordenada; peor que cualquier drama que hubiera visto en la televisión. Hayden observaba a las mujeres con ojos desapasionados mientras sus hombres se deshacían de ellas. ¿Cómo podía tratar a las mujeres como cosas sin valor? Era impactante.
No sabía qué habían hecho esas chicas para merecer eso, pero debería haberlas despedido y pedirles que se fueran en paz. Supongo que Hayden no tuvo una buena noche con sus chicas... no es que fuera asunto mío o me importara.
Cuando las chicas y los hombres de negro se hubieron ido completamente de la suite, Hayden y yo estábamos solos una vez más. Se volvió para mirarme con una expresión indescifrable mientras nuestras miradas se cruzaban. Parecía que quería decir algo, pero decidió no hacerlo. Si pensaba que quería una explicación de lo que acababa de presenciar, podía ahorrársela. No quería saber nada.
Sin decir una palabra, me di la vuelta sobre mis talones y me dirigí directamente a mi dormitorio. Cerré la puerta con fuerza y firmeza detrás de mí y la cerré con llave una vez dentro de la habitación. Una mirada al reloj en la pared mostró que eran horas pasadas de la medianoche.
No podía dormir. Me revolvía en la cama con los ojos bien abiertos y el dorso de mi mano descansando en mi frente. Odiaba admitirlo, pero estaba muy confundida y molesta por lo que Hayden dijo. ¿Por qué me defendió contra esas chicas? No es como si necesitara su ayuda... lo que dijeron realmente no me molestó.
¿Por qué les dijo que yo era su novia?
Antes de darme cuenta, mis cejas estaban fruncidas y comencé a sentirme frustrada e irritada. De repente, mi cuerpo se sentía incómodo y dormir era lo último en mi mente. Esto es un desastre, tengo tantas cosas que necesito hacer mañana...
Toc Toc Toc
De repente, escuché tres golpes muy fuertes y distintivos en la puerta de mi dormitorio. ¿Quién podría ser?
Más bien, ¿quién más podría ser?
¿Por qué Hayden está tocando a mi puerta?
¿A quién le importa? Voy a fingir que ya me he dormido y no escuché nada. Lentamente me di la vuelta y me cubrí la cabeza con la manta.
—¡Malissa! —llamó mi nombre tan fuerte que me habría despertado si hubiera estado dormida. Este tipo no tiene sentido de la decencia.
Decidí permanecer en silencio y no responder.
—¡Malissa! Abre la puerta. Sé que no estás dormida —llamó Hayden a través de la puerta mientras comenzaba a golpearla con más fuerza.
Me giré y me senté en la cama de un solo movimiento. ¡No estoy de humor para esto! Sin pensarlo, me levanté de la cama y me dirigí hacia la puerta. ¡Voy a decirle que se calle y vuelva a su habitación para que finalmente pueda irme a dormir!
--Continuará...