Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 10 Ofenderlo es morir

—¡No voy a dar masajes a los pies de nadie! —Ivy colgó el teléfono decididamente, preocupada de que Emma volviera a llamar, y apagó su teléfono para poder dormir.

Al día siguiente, Ivy se despertó temprano, lista para salir a buscar trabajo. Pero antes de que pudiera irse, María trajo a Emma.

—Ivy...