Read with BonusRead with Bonus

CAPÍTULO CINCUENTA Y SEIS

El viaje fue bastante movido, por decir lo menos. Mientras Kane conducía, yo estaba atrapada entre los gemelos, cuyos toques me ponían nerviosa.

Hablamos de cosas triviales, pero era obvio que me desnudaban con la mirada a cada momento que pasaba.

—¿Cómo estuvo el trabajo hoy, Princesa? —preguntó ...