Read with BonusRead with Bonus

CAPÍTULO CIENTO VEINTIOCHO

El aire en el hospital olía diferente y no podía entender por qué, pero mientras esperaba a que Elena despertara, me di cuenta de que me estaba debilitando.

Me acerqué a Axel y lo revisé primero. Todavía estaba durmiendo, así que dejé los informes que había planeado mostrarle en la mesa que estaba ...