Read with BonusRead with Bonus

Capítulo setenta y ocho: atrasado

Una vez que les demostré a los chicos el nuevo control que había adquirido, saqué a Griffin de su trance y le permití tener su libre albedrío, que nunca debió haberle sido arrebatado en primer lugar.

Después de explicarle lo que le había sucedido, todo lo que pudo hacer fue caminar de un lado a ot...