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Capítulo 4 - Lilah

*No quería estar aquí, pero Logan sentía la necesidad de explicar y yo sabía que no iba a poder irme sin que lo hiciera, así que me senté, dejándole decir lo que necesitaba.

Conozco a mi Logan... aunque parece que ya no es mi Logan, no con una compañera afuera... pero aún así lo conocía, y parecía estar luchando tanto como yo con esta situación.*

*¡Aunque seguramente el hecho de que haya encontrado a su compañera debería ayudar con eso! Solo quería que la tierra me tragara por completo...

He amado a este chico durante años... le he contado todos mis secretos... he crecido con él... compartí mi primer beso con él... jugueteamos juntos... oh... ¡gracias a la diosa! ¡Gracias a la diosa que nunca fuimos más allá asumiendo que éramos compañeros!*

Una pequeña sensación de alivio me invadió, esperar hasta que tuviéramos nuestros lobos antes de llevar nuestra relación al siguiente nivel claramente fue lo correcto. Aunque dormir con alguien que no es tu compañero no es raro, definitivamente es mal visto por muchos. Siempre había imaginado mi primera vez con mi compañero... con Logan... pero siempre eran lo mismo para mí en mi mente, ¡¿qué tan equivocada podía estar?! Sollozé de nuevo. ¿Qué tan equivocados estábamos todos?

—Lo siento, Lilah, pensé que serías tú, realmente lo pensé, todos lo hicimos. No podía esperar a verte esta mañana, estaba rondando esperando que vinieras a verme, papá hizo lo que mejor sabe hacer y me arrastró a la casa de la manada con él, así que estaba relajándome en el salón —comenzó a explicar.

—Ani estaba aquí con su papá, ya que había venido a empezar a trabajar, tan pronto como ella entró mi lobo estaba gritando por ti, Lilah, pensé que debías haber entrado... te estaba buscando por todas partes... —parecía angustiado mientras explicaba la escena, su respiración se aceleraba al describirme la escena.

—Lilah, mis ojos recorrían toda la habitación, esperando verte, para agarrarte y gritar compañera, y ver tu sonrisa cuando finalmente pudiera hacerlo... ¡pero no podía verte! ¡Estaba entrando en pánico, cariño! —su respiración se volvía más difícil mientras explicaba, su pánico por la situación era evidente en su voz.

—La única chica en la habitación era Ani, ella no tenía idea de lo que yo estaba sintiendo, se acercó a mí sonriendo, y me dio un abrazo mientras me decía feliz cumpleaños y mi cuerpo estaba zumbando con chispas extrañas, ya sabes, las que te cuentan, mi lobo estaba gritando compañera, pero mi corazón también se estaba rompiendo, Lilah, se estaba rompiendo porque no eras tú —estaba sentada mirándolo, las lágrimas ahora caían por nuestras caras por lo que él había descrito.

¿Cómo puede ser tan cruel el destino?

—Loge, está bien, solo para, no quiero saber los detalles —suspiré, dudando que pudiera soportar escuchar más.

Mi futuro entero literalmente se había desintegrado frente a mí, mi futuro compañero no era mi compañero... ¿Cómo pudo estar toda la manada tan equivocada? ¿Podría nuestra conexión ser puramente a través de la amistad y no ser un vínculo a través de ser compañeros destinados como habíamos pensado? ¿Cómo habíamos leído todo esto tan mal? Voy a tener que acostumbrarme a verlo con otra... ¡necesitamos detener esto!

—Lilah, sabes cuánto te amo —Logan extendió la mano hacia mi rostro, de una manera que conocía muy bien y que significaba que quería besarme, una manera que sabía que me encantaba.

—¡DETENTE! —grité, alejándome un poco—. No vamos a hacer esto, ahora tienes una compañera. No podemos estar juntos, lo sabes. ¡Estabas besando a Ani hace un minuto, Loge!

—Cariño, lo siento —sollozó Logan, bajando su mano de mi rostro, para luego levantarla de nuevo y pasarla por los rizos de su cabello castaño en señal de exasperación—. Del, ¡no puedo evitar esto! Te amo, siempre lo he hecho, lo sabes, no puedo simplemente apagar eso. Pero ahora también quiero a Ani, mi lobo quiere a Ani, el vínculo de compañeros me está atrayendo hacia ella, gritando por ella, te atrae de una manera que no puedo explicar, aún no lo sabrás, pero es difícil, cariño, yo...

—Deja de llamarme cariño —interrumpí, tratando de sonar más fuerte de lo que realmente me sentía—. Ya no soy tu cariño, Logey, yo también te amo. Y sé que esto no es tu culpa, el destino no fue como pensábamos, pero no podemos seguir con esto... ahora tienes que enfocarte en tu compañera, la manada depende de ti, lo sabes, y tus padres van a esperar cosas de ti y de ella como futuros Alfa y Luna —solo decir eso estaba rompiendo mi corazón en pedazos, pero necesitaba hacerlo, tenía que hacerlo...

Esto duele tanto y no, no sé cómo se siente el vínculo de compañeros, ni siquiera quiero pensar en un compañero allá afuera, mi corazón es de Logan... siempre lo ha sido... yo todavía era suya...

No sé cómo voy a hacer esto, va a tomarme tiempo asimilar todo esto. Sollozé en silencio de nuevo mientras mi cerebro procesaba mis pensamientos y los eventos de lo que acababa de suceder, odio esto, odio cómo el destino puede joderte...

Logan estaba a mi lado de nuevo, sosteniéndome en sus brazos, presionándome contra su pecho. Podía sentir el latido familiar de su corazón... podía sentirlo sollozar también, en el fondo sabía que esto no era su culpa, pero él tiene una compañera que lo hace más fácil mi cerebro me respondía, yo estoy completamente sola... mi cabeza era un caos...

Logan levantó mi barbilla con su mano y sentí sus labios alcanzar los míos, el beso que había estado esperando desde anoche ahora teñido de tristeza y amargura, desesperación mientras me besaba con pasión y amor pero también teñido de tristeza y desesperación mientras las lágrimas corrían por nuestras caras.

No deberíamos estar haciendo esto... mi cerebro trataba de racionalizar... él tiene una compañera... pero este es mi Logan...

Sentí su lengua separar mis labios para abrirse paso en mi boca, mientras nos besábamos, mi lengua se entrelazaba con la suya de esa manera familiar, mientras comenzaba a mordisquear mi labio inferior, podía saborear la salinidad de nuestras lágrimas mezcladas...

¡BOOM, BOOM, BOOM! Un golpe en la puerta nos hizo volver a la realidad.

—¡LOGAN! —escuché la voz del Alfa Grayson penetrando a través de la madera de la vieja puerta de la oficina.

Logan me miró con culpa—. D, lo siento, no debería haber... —no necesitaba escuchar más, sabiendo que había lamentado sus acciones, agarré mi bolso, ajusté mi ropa, me limpié las lágrimas de la cara y salí de la oficina. Brevemente saludé al Alfa mientras pasaba—. Hola, tío.

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