Read with BonusRead with Bonus

CAPÍTULO 7— PERTURBACIÓN POR CALOR

Tanto Zillon como Celeste se volvieron en dirección a la puerta, viendo a Celia parada justo en medio de ella. Lágrimas llenaban sus ojos, y al verla, los ojos de Zillon cambiaron de naranja a obsidiana.

—¿Celia...? No es lo que piensas, te lo juro.

Se apartó de Celeste, haciendo que ella se estr...