Read with BonusRead with Bonus

CAPÍTULO 19 Los pecados del padre

Estaba completamente abrumada. No tenía idea de dónde estaba y no podía ver nada. Todo lo que sabía era que hacía frío a mi alrededor y el único otro olor que podía distinguir además de una colonia barata era polvo y cemento. Si tuviera que adivinar, diría que estaba en algún edificio grande, ¿quizá...