Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 154 Ley de equilibrio

Víctor cerró la puerta del conductor y caminó hacia el frente del coche.

—Daisy, lamento si parecí enojado —dijo—. Pero deberías entrar. Se está haciendo tarde y necesitas descansar.

Frustrada, puse las manos en mis caderas.

—¿Cómo se supone que descanse cuando mis amigos siguen enojándose conmig...