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Capítulo 98 ¡Maldita sea, el brazalete estaba cambiado!

No muy lejos, Felipe cojeaba hacia el lugar con un bastón, Lisa a su lado, prácticamente pegada a él.

Lisa se aferraba al brazo de Felipe como si su vida dependiera de ello, retorciendo su cintura tanto que parecía que iba a romperse.

La multitud, sintiendo algo de drama, comenzó a susurrar.

—¿Es...