CAPÍTULO 6 2 AÑOS DESPUÉS DE GEMMA (17º cumpleaños)
Han pasado 2 años desde que logré escapar de Richard y me encanta. Finalmente tengo una familia que me ama por quien soy. Lamentablemente, no pude volver a la escuela o a la universidad. Maggie me educa en casa y también me enseña a usar mis poderes. Hasta ahora, puedo mover objetos con mi mente, puedo teletransportarme a cualquier lugar, puedo cambiar mi ropa. Las mejores partes son la curación y ser invisible, y me encanta. Siento que me estoy volviendo más fuerte y Maggie dijo que cuando obtenga mi lobo, me volveré aún más fuerte...
Me encantan los paseos por el bosque, especialmente cuando vamos a la cabaña. Tiene una mini cascada con un lago que atraviesa los parques.
Estoy esperando el día en que pueda vengarme. Verás, no le he contado a los demás, pero sé que llegará el día en que atraparé a Richard y a Khloe y les daré una probada de lo que les espera...
Maggie siempre decía que no debería decirle a la gente lo poderosa que soy, ya que me tratarían de manera diferente. Como expliqué, he pasado por eso, y lamentablemente, lo peor de ello.
Me da un impulso cada día para vengarme de Richard por todo lo que ha hecho, por la forma en que viví, las cicatrices por todo mi cuerpo que nunca se irán, su nombre grabado en mi espalda, Khloe tallando letras en mis brazos usando su magia. Los mataré a ambos algún día.
También necesito averiguar cómo activar mi lado vampírico, entonces seré intocable. Richard y Khloe no sabrán qué los golpeó, pero no sé cómo activarlo. Maggie hizo un hechizo y dijo que soy la única que existe, que mi tipo fue cazado y asesinado por lo poderosos que son.
Richard no me dijo nada, solo seguía diciendo que yo no era nada y que siempre sería nada para él. Es como si unos días después de que me escapé, Richard estuviera a punto de preguntar a la gente si me habían visto y se acercó a John y Maggie saliendo de un supermercado mostrando mis fotos: "¿Han visto a esta chica?"
—No, lo siento, no la he visto. Nunca la he visto antes —respondió Maggie.
—John dijo, muéstrame la foto de nuevo —Richard se la mostró de nuevo y entonces John decidió decir—: La he visto y te diré que cruzó la frontera cortando lazos con los alfas. Dejó la manada, la vi. También informé a los alfas.
John también me informó que Richard estaba maldiciendo y pateando mientras se alejaba.
Estoy muy agradecida con John por decirle que dejé la manada y me mudé. Espero que Richard nunca me encuentre hasta el día en que yo lo encuentre a él.
Hoy es mi cumpleaños número 17, y Maggie y John insistieron en que tengamos una fiesta...
—No quiero una fiesta, de todos modos nadie vendrá, no tengo amigos —respondí.
—No te preocupes, querida, solo seremos nosotros y eso es todo lo que necesitamos, siempre y cuando estemos todos juntos —dijo Maggie. Creo que sabía que estaba empezando a ponerme nerviosa.
—Entonces, hagámoslo.
Maggie y John me han mantenido al tanto de todo lo que sucede en la manada. También me dijeron que los alfas Jayden, Logan y Asher se convirtieron en los alfas completos de la manada. Estoy tan contenta de estar lejos de ellos, probablemente me harían esclava en la casa de la manada...
Se estaba acercando la hora en que Sean y Emily estarían en casa pronto. Me encanta cuando regresan. Siempre he soñado con tener una familia feliz. Puedo decir con gusto que mi deseo se cumplió. Cuando Emily y Sean entraron por la puerta, Emily corrió hacia mí saltando en mis brazos, dándome un abrazo y cantando:
—¡FELIZ CUMPLEAÑOS! TE TENGO ESTO.
Tomé la caja que me dio y la abrí.
Emily dijo: —Espero que te guste.
Respondí: —Me encanta. Era una cadena azul y dorada con una lágrima de diamante. Tenía lágrimas en los ojos. Emily me ayudó a ponérmela y dije: —Nunca me quitaré esta cadena. Me encanta, muchas gracias, significa mucho para mí.
Sean se acercó a mí diciendo: —Es mi turno, aquí tienes, hermana.
Tomé una caja similar, la abrí y obtuve un relicario de oro. Un lado tenía una foto de John y Maggie y el otro lado tenía una de mí, Sean y Emily. Eso sí me hizo llorar.
—Muchas gracias a los dos. De hecho, a todos ustedes. He tenido un día especial hoy y nunca lo olvidaré. No sé cómo podré devolverles todo esto.
—No digas tonterías. Nos has alegrado el día estando aquí y siendo tú misma, y eso es más que suficiente.
—Ahora vamos, comamos y empecemos la fiesta. Aquí tienes tu primera copa de vino —dijo John.
Mientras estábamos pasándolo bien, hubo un fuerte golpe en la puerta. Me congelé y dije: —¿Quién es?
John respondió: —Ve a la cocina, son los alfas, puedo olerlos.
Corrí a la cocina con Emily y Sean junto con Maggie detrás de mí.
John abrió la puerta y dijo: —Hola, alfas, ¿en qué puedo ayudar? ¿Todo está bien?
Jayden respondió: —Nos enteramos de que habrá un ataque a la manada. No sabemos cuándo, pero estamos abriendo. Todos vendrán y se quedarán en la casa de la manada, Tío John.
John respondió: —No puedo hacer eso, chicos. Maggie y los niños no se moverán, pero haré que Maggie ponga una barrera alrededor de nuestra casa y terreno.
—Por favor, Tío John, ven con nosotros, nuestra familia, y no te dejaremos desprotegido —dijo Logan.
—Chicos, no podemos dejar a Maggie, ¿no saben lo que pasó hace años? La manada no estará de acuerdo porque ella es diferente, es un híbrido, y no necesito que los traten de manera diferente, chicos.
—Está bien, Tío John, pero prométeme que estarás a salvo, alerta y cuidando tus espaldas. Pasaremos de vez en cuando para asegurarnos de que todos estén bien. Si también escuchas algo, por favor háznoslo saber, Tío.
—Por supuesto, chicos, y ustedes tengan cuidado y cuídense. Gracias por la advertencia, alfas.
Yo, Sean, Maggie y Emily estábamos en la cocina. Estaba aterrada. ¿Y si entran a la cocina y me ven? Estoy condenada. Me arrastrarán de vuelta a Richard.
Después de escuchar a John despedirse de los alfas, estaba nerviosa. Les dije a los demás: —¿Y si me encuentran? Me voy a dar un paseo por el bosque.
Emily dijo: —Déjame ir contigo. No quiero que estés sola en la oscuridad.
—No, está bien. Estaré bien. Tú ve y relájate. Me encanta ir al bosque, es relajante escuchar la naturaleza.
Cuando salí por la puerta principal y comencé a caminar más profundo en el bosque, llegué a mi lugar, que es el lago. Es un lugar increíble para venir y relajarse. No puedo creer que nunca haya sabido de este lugar antes, pero, de nuevo, no me permitían salir, solo ir a la escuela y regresar. Cómo ha cambiado mi vida. Siento luz en mi vida y no solo oscuridad...
Al siguiente minuto, escuché pasos y me di la vuelta, nunca adivinando a quién estaba mirando. No podía creer que allí estaban los alfas...
El alfa Jayden dijo:
—¿QUIÉN ERES Y POR QUÉ ESTÁS AQUÍ? NO DEBERÍAS ESTAR AQUÍ.
La verdad es que me alegraba un poco que no me reconocieran, pero sabía que en el momento en que respondiera y me diera la vuelta completamente, sabrían quién era.
—Oh, alfas, ¿no pueden recordarme? No juguemos.
Logan parecía sorprendido y dijo: —¿Cómo estás aquí? Todos dijeron que te vieron cruzar las fronteras de la manada.
—¿Qué importa? No voy a dejar que me lleven de vuelta a ese monstruo de tío mío llamado Richard —dije.
Entonces Asher habló: —Él ha estado buscándote día y noche, volviéndose loco.
—Oh, de verdad, mi corazón sangra por él. Es bueno actuando, no le importaba una mierda de mí. Todo lo que sabe hacer es ser malvado.
Jayden dio un paso hacia mí y le dije:
—NO TE ACERQUES MÁS, TE HARÉ DAÑO, NO HE OLVIDADO TODA LA MIERDA HORRIBLE QUE ME HICIERON.
—No vamos a hacerte daño, Gemma, pero intentamos encontrarte. Lo que te hicimos no estuvo bien y lo sentimos por eso. Sé que no lo hace mejor, pero por favor, éramos jóvenes y estúpidos. Hemos crecido mucho, somos alfas, hemos cambiado nuestra forma de vivir —dijo Logan.
—Nunca confiaré en ninguno de ustedes —dije con tristeza en mi voz.
Jayden no creía que le haría daño e intentó acercarse más, así que giré mi muñeca, una luz plateada y roja alrededor de mis manos, mis ojos brillando en plata y un toque de rojo. Les grité:
—RETROCEDAN AHORA, LO DIGO EN SERIO, LES HARÉ DAÑO.
Jayden aún no escuchó, así que giré mi muñeca enviándolos volando hacia atrás. Cuando aterrizaron de espaldas, se levantaron y me miraron con sorpresa. No pensaban que lo haría, pero lo hice.
Después de que se levantaron, Jayden dio un paso adelante diciendo:
—No queremos hacerte daño. Solo estamos aquí por el increíble olor y cuando te vimos, nuestros lobos nos dijeron que eres nuestra COMPAÑERA. Deberías sentirlo como nosotros. Sentimos la conexión y estoy seguro de que tú también.
Entonces le grité:
—NO ME HAGAS REÍR, NO SIENTO NADA, IDIOTAS. NO TENGO 18 AÑOS AÚN Y AUNQUE LOS TUVIERA, LOS RECHAZARÍA. ¿ENTIENDEN, ALFAS? DESPUÉS DE TODO LO QUE ME HAN HECHO.
—Escucha, Gemma, sé que no confías en nosotros y lo entiendo después de todo lo que he hecho, lo que hemos hecho, pero una cosa que debes saber es que la noche que te escapaste hace 2 años, te dejamos ir. Si hubiéramos querido, podríamos haberte detenido y, en el fondo, lo sabes. Te estábamos vigilando desde la otra habitación. Intentamos encontrarte para decirte lo arrepentidos que estamos, pero no logramos encontrarte hasta ahora. No sabíamos el dolor y sufrimiento en el que estabas y entiendo que lo empeoramos, pero lo compensaremos todo —dijo Logan.
—También le dijimos a Richard que cruzaste la frontera y sentimos el vínculo romperse cuando dejaste las fronteras. ¿No te dice eso algo, Gemma? —dijo Asher.
—Richard no estaba contento, destrozó toda la casa porque te perdimos —dijo Jayden.
—Solo piénsalo, Gemma. Con nosotros sentirás el vínculo de compañera más cerca de tu cumpleaños y no te dejaremos rechazarnos sin darnos una oportunidad. Sabemos que hemos hecho mal y queremos compensarlo —dijo Logan.
Solo rodé los ojos. Como si les diera una oportunidad. No lo creo en absoluto. Necesito advertir a Maggie. Tiene que haber una manera de romper el vínculo. Nunca podría estar con ellos, nunca darles una oportunidad...