Read with BonusRead with Bonus

Placer

El rostro de Lucía estaba sonrojado de vergüenza, pero extrañamente, no estaba enojada cuando Bryan la llamó puta. Bryan la había llevado al punto en que ya no podía enfadarse más.

En ese momento, su cuerpo estaba lleno de un calor extraño, pero era muy difícil de resistir. Sentía una sensación dif...