Read with BonusRead with Bonus

88

Isabella

Damon volvió a entrar y luego, con una mirada decidida en su rostro, se inclinó hacia arriba y agarró mis piernas. Comenzó a embestirme lentamente, moviendo sus caderas en el proceso. Mis ojos captaron el movimiento y lo encontré hipnótico.

Mis ojos siguieron el movimiento de sus caderas ...