Read with BonusRead with Bonus

Epílogo

Alexander North

7 años después...

Me desperté porque alguien chocó su cuerpo contra el mío. Abrí los ojos de repente para ver a mi hijo y mi hija riendo y saltando en nuestra cama.

—¡Archer! ¡Autumn! —llamé y ellos seguían riendo.

—Ay, Dios mío —gemí.

—¿Quién se robó las galletas de mamá? —Ange...