Read with BonusRead with Bonus

Tenemos que hablar

La sombra se movió de nuevo, lenta, deliberada.

Entonces se puso de pie.

Diana.

Su cabello estaba suelto, cayendo sobre sus hombros en ondas oscuras que atrapaban la tenue luz. Llevaba una camiseta de seda negra y una falda que apenas cubría su trasero, sus piernas desnudas, su boca curvada en es...