Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 143 Envuelto en felicidad

Susan gritó al teléfono:

—¡Oye, ¿estás loco?!

Lo tomó en serio porque sabía que Seb podía hacer cualquier cosa.

—Solo quiero un beso de buenas noches. Si no me lo das, iré a tu casa —dijo Seb juguetonamente.

Susan se asustó y rápidamente respondió:

—Está bien, te enviaré un beso de buenas noche...