Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 395

La temperatura en la habitación del hospital pareció bajar a niveles de congelación en un instante. El hombre con la máscara plateada sacó una silla y se sentó, su mirada era gélida y penetrante.

—¿Qué pasa, no puedo volver a Cuenca?

—Será mejor que desaparezcas en tres días —dijo Iván, pronuncian...