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Capítulo 296 No tengas miedo, estoy justo detrás para protegerte.

Lela parpadeó.

¡Sylvester parecía enojado!

Dejó el pan a un lado, se recostó en su silla, tomó casualmente un pequeño trozo de pastel delicado y se lo metió en la boca. Cuando Lela no estaba prestando atención, entrecerró los ojos y se inclinó para darle de comer.

Su rostro apuesto se acercó a Le...