Read with BonusRead with Bonus

65

A la mañana siguiente me desperté, recostada sobre el pecho de Tristan, sus brazos alrededor de mí como si fuera algún tipo de restricción de la que podría intentar escapar. Parpadeé varias veces, tratando de despejar el sueño de mis ojos y enfocarlos.

Con cuidado, me moví, intentando no despertar ...