Read with BonusRead with Bonus

56. «Llama a tu esposo...»

La mano de Christopher recorre el costado de mis muslos, agarrando mis caderas con una fuerza posesiva. Su pulgar presiona justo debajo de mi hueso de la cadera, aplicando suficiente presión para mantenerme firme mientras su otra mano juega con mi entrada empapada con su polla.

—Ponte en cuatro par...