Read with BonusRead with Bonus

44. «No corras, Charlotte».

Abro los labios para responder, aunque no sé exactamente qué decir... Pero mi mente se queda en blanco cuando Christopher agarra mi muñeca y me hace tocarlo con fuerza. La presión de su bulto contra mi palma me hace tragar un gemido, intensificando el calor entre mis piernas.

Suelta mi mano, pero m...