Read with BonusRead with Bonus

CAPÍTULO 128

BRIELLE

—¡Gracias a la diosa que has vuelto! —gritó Tania, corriendo hacia mis brazos para darme un abrazo. La sostuve cerca, abrazando a mi dulce doncella, que tenía lágrimas en esos ojos saltones suyos.

Ni siquiera nos permitió entrar completamente en la mansión. Me vio en la entrada y se lanzó ...