Read with BonusRead with Bonus

CAPÍTULO 12

ESTELLE

Grité de dolor, corriendo por todos lados para agarrar algo con lo que pudiera limpiar mi cara y ojos ardientes.

El dolor era insoportable.

¡Está tan caliente!

—¡Mi cara! ¡Oh, mi cara! —lloré, saltando y entrando en pánico. No podía encontrar nada para usar.

—¡Estelle! —escuché la voz d...