Read with BonusRead with Bonus

Capítulo 115 Lealtad destrozada

En el Reino de Valoria, una red de espías controlada por el Príncipe Heredero se volvió rebelde tras su accidente, masacrando a familias vinculadas a sus operaciones. Este acto brutal destruyó la reputación del Príncipe Heredero y paralizó la inteligencia del reino.

El General Yancy sufrió una gran pérdida cuando su familia y las de sus hijos fueron masacradas en la Frontera Sur. Los rumores señalaban a la Capital Occidental como los culpables.

Sophia ordenó la masacre del pueblo, pero los espías de la Capital Occidental eran igualmente culpables. La familia Anderson fue la más afectada, dejando solo a Ava, la general femenina mencionada por Sophia, con vida. Para colmo, Sophia tomó el lugar de Ava como esposa de Ethan.

Aunque no estaban directamente vinculados a la Capital Occidental, ellos fueron responsables de la desaparición de la familia Yancy y del destino de Ava. Su reputación quedó manchada. La rabia de Ivan provenía de esta culpa y enojo profundos. La Capital Occidental valoraba su honor, y la masacre de niños inocentes era una mancha imperdonable para la familia real.

Ahora, sugerir que capturaran a Ava era un cruel recordatorio de su pecado, una bofetada a su integridad. La furia de Ivan estalló, y ordenó que Sophia fuera golpeada y arrastrada.

El vanguardia adjunto condujo a los prisioneros fuera del Pueblo de Loto Carmesí. Marcharon a través del desierto y las montañas escarpadas hasta una casa de madera destinada a encarcelar a Sophia. Ella sufriría diez veces más por la humillación del Príncipe Heredero.

Dieciocho prisioneros eran todos soldados bajo el mando de Sophia, cómplices en la masacre del pueblo. Entre ellos estaba Robert, primo de Sophia. Una vez leales a ella, ahora observaban con asombro cómo los usaba como escudos humanos.

El leal y valiente General Bell que conocían había desaparecido, reemplazado por una extraña. Su orden de capturar a Xavier y al General Anderson, especialmente después de que Ava demostrara su valía al recuperar la Frontera Sur, fue la gota que colmó el vaso. Apestaba a venganza personal y cobardía.

Si se trataba de una venganza personal, ¿no debería ser el General Anderson quien buscara venganza? Después de todo, Sophia había orquestado su compromiso con Ethan, robándoselo a Ava. Sus acciones destrozaron su lealtad.

Mientras los soldados de la Capital Occidental los ataban en la casa de madera, Robert no pudo contener su ira. —¡Usaste a Paul como escudo! —escupió—. ¿Pensaste que nuestras vidas valían menos?

Previous ChapterNext Chapter