Read with BonusRead with Bonus

complacerlo

—Sabes, estoy empezando a pensar que tal vez, solo tal vez, tenías razón —dije, y sus músculos se tensaron.

—Hmmm —dijo, irritándome aún más.

—Ya no te importo, ¿verdad? —le pregunté, mirando su espalda.

—Esto es chantaje, Samantha, y lo sabes —dijo, aún de espaldas a mí. Di pequeños pasos hacia ...